El apartado (i) del artículo 2 de la Convención contra la Delincuencia Organizada describe la entrega vigilada como la técnica para permitir que las remeses o envíos sospechosos salgan de una jurisdicción, la atreviesen o entren en ella con el conocimiento y la supervisión de las autoridades. La Convención de las Naciones Unidas contra el Tráfico Ilícito de Estupefacientes y Sustancias Sicotrópicas (1998) ya ha recomendado el uso de la entrega vigilada para luchar con el narcotráfico.
La entrega vigilada en la Convención contra la Delincuencia Organizada La «entrega vigilada» debe entenderse como la técnica consistente en dejar que remesas ilícitas o sospechosas salgan del territorio de uno o más Estados, lo atraviesen o entren en él, con el conocimiento y bajo la supervisión de sus autoridades competentes, con el fin de investigar delitos e identificar a las personas involucradas en la comisión de éstos. |
Las entregas vigiladas se usan, entre otras cosas, para rastrear el flujo de bienes ilícitos, como drogas, especímenes de vida silvestre, productos de imitación o productos médicos falsificados, para determinar sus orígenes verdaderos, rutas de tránsito y destinos. Las entregas vigiladas permiten el mapeo tanto de planes delictivos completos como de las estructuras de los grupos delictivos organizados con el propósito de llevarlos a juicio. Sin las entregas vigiladas, suele ser difícil conocer o probar los papeles reales que cumplen los miembros de los grupos delictivos organizados (CITES, 2011).
Algunas de las preguntas a continuación son clave para las entregas vigiladas: (UNODC, 2016):
La entrega vigilada se utiliza como una técnica de investigación en muchos países, aunque con diferentes condiciones y para diferentes categorías de delitos (UNODC, 2013). Se utiliza en la investigación de casos de delincuencia organizada transnacional debido a que se reconoce que es necesario entender el tamaño, la forma y el alcance la actividad delictiva organizada, las estructuras y los papeles que se cumplen en los grupos delictivos organizados si se quiere desmantelarlos.
La entrega vigilada es una herramienta de investigación que ayuda a cumplir este objetivo, especialmente en casos en los que se identifica o intercepta el tráfico ilícito de productos en el punto de origen o en tránsito y luego son entregados bajo supervisión para identificar a los destinatarios que iban a recibirlos. También se utiliza para monitorear y recopilar pruebas sobre la posterior distribución dentro de un grupo de delincuencia organizada o en la cadena de suministro ilegal.En algunos casos, es posible sustituir los envíos ilícitos con materiales lícitos o falsos para prevenir los riesgos de perder los envíos ilícitos durante el proceso de entrega.
Sin embargo, hay delitos particulares como la trata de personas para la cual resulta problemático utilizar las entregas vigiladas. Cuando existe información de que una operación de trata de personas involucra el traslado de las víctimas, las fuerzas del orden usualmente deben priorizar la protección de las víctimas por encima de mantener a los delincuentes bajo vigilancia. El objetivo es obtener información de inteligencia e información sobre todos los involucrados en la operación de tráfico, desde los encargados de reunir a las víctimas hasta los responsables del traslado y la explotación de estas, sin poner en riesgo la seguridad de la víctima. Por lo tanto, se necesita realizar una evaluación cuidadosa del riesgo antes de utilizar la técnica de entrega vigilada.